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#Novedades de la industria
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Una conversación más sana
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Cuando alguien le sugiere charla a su doctor, recuerde tomarlos literalmente.
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La investigación reciente sugiere una correlación fuerte entre los trajes de negligencia y la comunicación pobre del doctor-paciente. En muchos aspectos, esto tiene sentido intuitivo: de expectativas de manejo a evitar las complicaciones, asegurándose de los pacientes entienden que su plan médico de la situación y del tratamiento sea crítico a asegurar mejores resultados. Mientras que los trajes de negligencia se pueden traer por una variedad de razones, la comunicación de la calidad puede atenuar muchos de ellos (con la excepción obvia del error humano simple, siempre de un riesgo en medicina).
SU: ¿Amigo o enemigo?
Está claro que la mejora de la comunicación crea una mejor experiencia paciente y mejores resultados de la salud, reduciendo colectivamente la probabilidad de un pleito. Menos claro está el papel medió electrónicamente la comunicación jugará, para bien o para mal, en conseguir a pacientes a bordo con sus doctores.
Los historiales médicos electrónicos (ELLA), mientras que son obligatorios y casi universales, siguen siendo el tema de mucha discusión y controversia. Independientemente del coste de la puesta en práctica inicial, haciendo los gestos en curso hacia la realización de interoperabilidad para presentar desafíos financieros escarpados incluso para las instalaciones determinadas para permanecer en el filo. Entonces por supuesto, hay la curva de aprendizaje para los cuidadores experimentados que tienen que acomodar un nuevo modelo entero de llevar notas, consultando a través de departamentos, de la distribución y del recuperación expediente-todo encima de un compromiso ya que grava la formación permanente.
Dado todos los desafíos prácticos sabidos y emergentes que rodean la adopción de SUS plataformas, la cuestión de cómo afectarán la consulta (y, por la extensión, el índice de trajes de negligencia) merece una cierta consideración.
¿EHRs ayuda o dañar la comunicación del doctor-paciente? ¿En qué medida la demostración de registro electrónica que lo hacen los pacientes deben haber sabido mejor, que los doctores realizaron diligencia debida, y ésa “medicina defensiva cada vez más costosa” se puede evitar como innecesario evitar pleitos?
Uno de los factores más grandes que influencian las respuestas a estas preguntas es más demográfico que técnico.
La divisoria de Digitaces
Con vidas útiles más largas entrecruzándose con la entrada de nacidos en el baby boom en sus últimos años, las demandas principales en la industria médica de América están viniendo cada vez más de más viejos pacientes. Pero, apenas mientras que EHRs todavía está en sus primeros tiempos de la puesta en práctica y de la función, la mayoría de pacientes viene de la parte de la población lo más menos posible capaz o cómoda cuando se trata de la interconexión digital.
La resistencia para vender al por mayor la adopción de la tecnología no es una característica única a los pacientes del nacido en el baby-boom; las demandas de las regulaciones significativas del uso tienen médicos practicantes frustradas también. La industria moderna de la salud, apretada con obligaciones a los responsables políticos, los abogados, administradores, está pidiendo que los profesionales sobrecargados ahora trabajaran con los insectos y los defectos de la numeración. Los profesionales médicos experimentados tienen que cambiar viejos hábitos para acomodar nuevos sistemas y tecnología, sin ella incluso que se realiza necesariamente según lo prometido.
Hospitales y doctores que abrazan la lucha de la revolución para conseguir a pacientes hacer lo mismo, encontrando que las posibilidades presentadas por EHRs y conectividad de Internet no generan automáticamente el compromiso. Las nuevas maneras de alcanzar a pacientes fuera de la clínica también no cambian la consulta minuciosa 15; de hecho, la impertinencia de los ordenadores ahora molestan a muchos doctores (y sus pacientes) necesarios para registrar su tiempo cara a cara electrónicamente.
Entre el estado tenue de moderno SUS plataformas, resistencia institucional a las cargas añadidas de integrar nueva (y a menudo no comprobada) tecnología, y las limitaciones de más viejos pacientes, parece inverosímil que la mejora de la comunicación resultará de los nuevos medios de compartir y de intercambiar datos de la salud en línea.
Llevado en una era digital
Sin embargo, doctores más jovenes y los estudiantes de medicina están experimentando marcado menos fricción en tabletas de integración, SUS plataformas, y otras atavíos tecnológicas modernas en su proceso de entrega del cuidado. Muy el contrario: los estudiantes de medicina abrazan completamente, incluso la demanda, herramientas más digitales como parte de practicar la medicina del siglo XXI.
Asimismo, los pacientes milenarios y el segmento digital de la población en crecimiento de los naturales-uno destinados para alcanzar a nacidos en el baby boom en venir año-tienen menos dificultad o aprehensión en tomar instrucciones y la distribución de sus datos personales a través de interfaces electrónicos.
Mientras que la revolución digital puede no extender a la comunicación de la atención sanitaria en esta primera onda de la numeración, parece destinada desempeñar un mayor papel como naturales digitales alcanza la dominación en las poblaciones de ambos pacientes y cuidadores.
Pero eso no contesta realmente a la cuestión de si el tiempo de la calidad en la consulta cara a cara se puede substituir con eficacia por la comunicación digital, y si la expediente-distribución en línea rendirá resultados médicos mejorados, y ayude a evitar los trajes de negligencia.
Aprendizaje del ABC-de Medicine
Para toda la fanfarria sobre la integración digital, la distribución de más información con los pacientes no transforma más fácilmente inmediatamente el estado triste de la instrucción de la salud en los estados. Con 9 adultos de 10 luchando para comprender la información de la salud reciben, aumentando materias en línea del acceso menos que estableciendo la comprensión. Millennials puede contar con portales pacientes sofisticados y los apps prácticos de la salud, pero no les da vuelta en médicos especialistas. En última instancia, la comunicación no puede tener éxito sin la comprensión.
Esto todavía deja mucha presión en consultas tradicionales, una cuestión de hacer las preguntas correctas y la fabricación del contacto visual (en comparación con mirar fijamente en las pantallas) para asegurar la comunicación está trabajando en ambos extremos. Mientras que son jovenes los doctores pueden ser más cómodos con el equilibrio de la comprensión técnica y del elemento humano, que las miradas del ejercicio de equilibrio fijan para continuar hasta que más pacientes ganen una fundación más fuerte de la instrucción de la salud.
Según el entusiasmo de techies y de desarrolladores, pronto tendremos un app para eso, también.