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Para los cirujanos, nada es más importante que el conocimiento íntimo y la comprensión espacial de su campo operatorio. Sin embargo, incluso los métodos de obtención de imágenes tridimensionales sólo proporcionan una ayuda limitada porque los datos se ven en pantallas bidimensionales. Cuando se trata de la planificación quirúrgica o de la formación médica, la realidad mixta y virtual fomenta una mejor comprensión espacial del cuerpo humano.
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En la Realidad Mixta o Aumentada (RM/A), las imágenes generadas por ordenador se proyectan en el campo de visión del usuario con la ayuda de unos auriculares, mezclando así información digital con elementos del mundo real. La Realidad Virtual (RV) es un mundo totalmente digital, generado por ordenador, que los usuarios experimentan como un entorno inmersivo de 360º que les sitúa en el centro. Lo que se originó en la electrónica de consumo está beneficiando ahora a la sanidad y la medicina: La RM y la RV permiten a los médicos viajar virtualmente dentro del cuerpo de un paciente y obtener una visión tridimensional.
Planificación quirúrgica con Realidad Mixta
Estas aplicaciones son de gran ayuda en el campo de la cirugía, ya que ofrecen a los cirujanos una mejor manera de planificar las intervenciones quirúrgicas. "Hay diferentes enfoques para acceder a un tumor cerebral, con el objetivo de no lesionar las regiones del cerebro que controlan el lenguaje o la función motora", explica el Dr. Dominik Fischer, de Brainlab, en una entrevista con MEDICA-tradefair.com. Los cirujanos utilizan los datos de las imágenes bidimensionales para planificar cirugías complejas, dando la máxima prioridad a la seguridad del paciente. Los médicos utilizan estas imágenes bidimensionales y sus capacidades espaciales para comprender el campo operatorio. "Es mucho más sencillo, ilustrativo y útil ver la anatomía en tres dimensiones", añade Fischer.
Para ayudar a los cirujanos en esta tarea, Brainlab se asoció con Magic Leap y creó el Visor de Realidad Mixta. Este casco de resonancia magnética puede conectarse a bases de datos PACS para convertir los datos de imágenes transversales de RM o TC en modelos tridimensionales. Los cirujanos pueden utilizar estos modelos para planificar cirugías, aplicar el modo multiusuario para revisar casos complejos con sus colegas o preparar y educar a los pacientes sobre la cirugía.
Pero esas no son, ni mucho menos, todas las ventajas que ofrece la RM: "El siguiente paso será llevar la Realidad Mixta al quirófano", dice Fischer. Una opción concebible es mostrar los datos críticos en el campo de visión del equipo quirúrgico. De este modo, se eliminaría la necesidad de dividir su atención entre un monitor y la tarea en sí. Los datos de las imágenes preoperatorias también podrían superponerse al cuerpo del paciente, lo que mejoraría la visualización y la navegación del cirujano.
En el marco del proyecto "sonAR", el Instituto Fraunhofer de Investigación de Gráficos por Ordenador IGD está desarrollando actualmente este tipo de aplicación intraoperatoria. "Nos centramos principalmente en las biopsias con aguja guiadas por ultrasonidos. El sistema de RA permite a los médicos realizar una biopsia visualizando y apuntando a la zona objetivo", explica Matthias Noll, del Fraunhofer IGD, en una entrevista con MEDICA-tradefair.com. El objetivo es facilitar a los médicos la navegación por la aguja de biopsia, ya que no tienen que mirar hacia atrás y hacia delante entre el paciente y la imagen de la ecografía.
Transformar la educación médica con la realidad virtual
La tecnología de RV puede permitir un aprendizaje y una enseñanza más eficaces en el ámbito de la cirugía si se toma una página de la aviación y se utiliza un simulador práctico. Los muñecos simuladores o los modelos diseñados para ofrecer una representación real del cuerpo a través de diferentes materiales existen desde hace mucho tiempo. Mientras tanto, los simuladores digitales que ayudan a formar a los cirujanos en un entorno virtual inmersivo mediante auriculares de RV o facilitan las simulaciones en pantalla son menos comunes.
Un ejemplo de estos últimos son los simuladores quirúrgicos de VirtaMed. Este fabricante suizo de tecnología médica está especializado en simuladores de artroscopia. Estos sistemas combinan un modelo anatómico realista de la articulación respectiva y el equipo endoscópico con tareas específicas que los alumnos deben realizar en la pantalla. Las tareas incluyen la realización de procedimientos quirúrgicos simulados o ejercicios más abstractos como el uso de una pinza para coger y colocar estrellas que se ciernen sobre la pantalla.
En primavera, VirtaMed presentó un laboratorio móvil de simulación quirúrgica, que lleva la formación médica a los hospitales en una furgoneta de carga reconvertida. Aunque esta formación de simulación quirúrgica nunca podrá sustituir totalmente a una operación real, el laboratorio móvil ofrece a los médicos la oportunidad de practicar habilidades quirúrgicas y mantenerse al día con los requisitos de formación médica incluso durante la pandemia de coronavirus. También reduce la necesidad de contacto con el paciente en el quirófano.
Las intervenciones quirúrgicas más complejas requieren una formación que proporcione un nivel más intenso de sensación y respuesta realista. El proyecto "Dynamic HIPS" combina un entorno de RV inmersivo con instrumentos que proporcionan a los usuarios una respuesta háptica realista mientras practican procedimientos de sustitución de cadera simulados. Los cirujanos en formación no sólo ven el quirófano y al paciente frente a ellos, sino que también sienten una respuesta mientras realizan los pasos quirúrgicos individuales. "El simulador les permite practicar el procedimiento quirúrgico en un entorno virtual antes de realizar su primera operación en la vida real bajo supervisión, todo ello sin necesidad de donaciones de cuerpos humanos o animales", explica Mario Lorenz en una entrevista con MEDICA-tradefair.com.
Tanto si el objetivo es evitar el contacto estrecho durante la pandemia de COVID-19 como si se trata de conservar los recursos educativos, la formación basada en la simulación de realidad virtual ofrece una ventaja clave: los cirujanos pueden utilizarla para perfeccionar sus habilidades en la formación y mejorar su rendimiento operativo, incluso si actualmente no hay casos agudos en su hospital que requieran tratamiento. Es un enfoque más directo para introducir a los cirujanos en los procedimientos quirúrgicos y elimina la necesidad de que observen repetidamente las cirugías antes de que finalmente realicen el procedimiento por sí mismos. Esto fomenta una mayor apreciación y una mejor comprensión de los procesos, al tiempo que les ayuda a superar posibles miedos e inseguridades.