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#Novedades de la industria
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8 tendencias clave que impulsan el futuro de la telesalud
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El futuro de la telesalud sigue siendo positivo
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Para hacer frente a las medidas de distanciamiento social puestas en marcha para ayudar a aplanar la curva de las infecciones por COVID-19, el sector sanitario tuvo que adaptarse rápidamente. La telesalud se convirtió en la tabla de salvación de hospitales, clínicas y médicos en el momento álgido de la pandemia, en busca de una forma de ofrecer la misma calidad de servicios asistenciales y minimizar la propagación del coronavirus. Han surgido tendencias clave en torno al uso de la tecnología que seguirán dando forma al futuro de los servicios de telesalud.
En pocas palabras, la telesalud utiliza la tecnología de la comunicación para prestar servicios sanitarios a los pacientes sin necesidad de estar en el mismo lugar físico, como el videochat a través de aplicaciones o cámaras web, teléfonos o software de videoconferencia.1 Antes de la pandemia, los servicios de telesalud eran generalmente servicios ad hoc limitados con una gran variedad de restricciones.2 Originalmente, se crearon para ayudar a los pacientes rurales y desatendidos a acceder a los especialistas cuando la ayuda local era muy limitada.3 Si avanzamos hasta 2020-2021, la telesalud se está generalizando en todos los aspectos de la industria
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la utilización de la telesalud se disparó en más de un 154% a finales de marzo de 2020 en comparación con el mismo periodo de 2019.4 Además, se espera que el mercado aumente a más de 397.000 millones de dólares en 2027 según las predicciones actuales realizadas por Fortune Business Insight.5 Para ilustrar el impacto que la pandemia ha tenido en el sector, en 2019 el mercado solo tenía un valor de 42.000 millones de dólares estadounidenses.5 Aunque el uso ha disminuido con el tiempo desde el punto álgido de la pandemia, ha quedado claro que la telesalud es ahora una parte fundamental del futuro de la prestación de asistencia sanitaria.6
Lo que se está haciendo evidente ahora es una nueva apreciación del potencial estratégico que la telesalud aportará al sector sanitario. A medida que las organizaciones de todo el mundo planean seguir utilizando esta tecnología, he aquí 8 tendencias clave que impulsan el futuro de la telesalud.
1. Aumento de la utilización de los pacientes
Lo que en un principio se implantó como estrategia para reducir la cantidad de transmisiones comunitarias, ha dado lugar a una conversación activa entre los profesionales sanitarios sobre la continuidad de las consultas de telesalud para muchos clientes en el futuro. Ahora se considera una primera línea de tratamiento rentable para las citas no urgentes y de seguimiento
A partir de julio de 2021, la utilización de la telesalud se ha estabilizado en 38 veces más que los niveles prepandémicos.6 E incluso antes de la pandemia, las pruebas apoyaban el aumento del uso de la telesalud.7 En una encuesta realizada por McKinsey, el 76% de los pacientes dijeron que estarían interesados en utilizar la telesalud en el futuro.6 Además, más de la mitad de los encuestados en un estudio del Journal of Telemedicine and Telecare afirmaron que utilizarían la telesalud para reponer medicamentos, preparar una próxima visita, revisar los resultados de las pruebas o recibir formación.8 Cabe esperar que los proveedores de servicios sanitarios y las compañías de seguros colaboren para ampliar la disponibilidad y la accesibilidad de la telesalud.
2. Aumento de la gestión de los cuidados crónicos
Aproximadamente 1 de cada 3 adultos padece una enfermedad crónica en todo el mundo, entre las que se incluyen enfermedades renales, cardíacas, cáncer, enfermedades pulmonares, alzheimer, diabetes y efectos secundarios de los accidentes cerebrovasculares.9 En la mayoría de los casos, las elecciones de estilo de vida y los métodos de atención preventiva pueden ayudar a estos pacientes a prevenir y tratar estas enfermedades.10 Sin embargo, una gran parte de estos pacientes no siguen su tratamiento, no toman o reponen sus recetas repetidas, o no acuden a sus citas de seguimiento regulares para ayudar a controlar sus síntomas.11
Esta falta de adherencia al plan de cuidados cuesta a la industria miles de millones al año.12 La telesalud tiene el potencial no sólo de reducir el coste de un plan de cuidados, sino también de mejorar el compromiso del paciente y su adherencia al mismo. La telesalud es una forma cómoda de que los pacientes se conecten con su médico de forma rápida y frecuente. Se elimina la necesidad de largas esperas en las salas de espera y el coste de los continuos desplazamientos a la consulta del médico. Además, tener conexiones más frecuentes entre los pacientes y los médicos puede permitir que los pequeños problemas se detecten con la suficiente antelación para reducir el riesgo de problemas o complicaciones posteriores
3. Mayor atención a la salud mental
Algo más del 10% de las personas de todo el mundo sufren trastornos de salud mental.13 La pandemia sólo pareció empeorar la situación, provocando un aumento de la depresión y la ansiedad como consecuencia de los encierros, los aislamientos y el aumento del miedo a lo desconocido. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la pandemia de COVID-19 interrumpió los servicios de salud mental en el 93% de los países del mundo.14 Las personas que ya recibían tratamiento vieron cómo se cerraban sus grupos de apoyo, se cancelaban sus citas con las clínicas y se limitaban gravemente sus salidas para aliviar los síntomas.
Para poder seguir tratando a los pacientes, muchos terapeutas, consejeros y médicos recurrieron rápidamente a las videoconferencias para seguir apoyando a sus pacientes. De ahí surgió el desarrollo de la teleterapia y la telepsiquiatría, que probablemente se convertirá en una forma de tratamiento ampliamente aceptada. Sin la pandemia, se cree que sólo la mitad de las personas diagnosticadas con trastornos mentales reciben tratamiento.15 Esto se debe en parte a la limitada disponibilidad de especialistas en un área determinada, pero gracias al avance de la teleterapia y la telepsiquiatría, es de esperar que esto sea cosa del pasado
4. Mejora de la experiencia del usuario
La demanda de los pacientes ha sido el mayor motor del crecimiento de la telesalud. Esta demanda de un acceso cómodo a los servicios asistenciales continuará y, como resultado, se crearán mayores expectativas en los proveedores. A medida que las organizaciones planifican el futuro de la telesalud, la experiencia y las expectativas de los pacientes deben estar en primer plano.16 Además, a medida que esta demanda sigue aumentando, cada vez hay más empresas que se ramifican y entran en el mercado, por lo que las organizaciones tendrán que hacer algo para adelantarse a la competencia
Los pacientes quieren que su experiencia de telesalud sea fluida e integrada, nadie quiere tener que hacer malabares con varias aplicaciones y sitios web diferentes. Esto significa que los desarrolladores están buscando formas de garantizar un servicio completo a través de comunicaciones integradas como el vídeo, el webchat y los bots, al tiempo que permiten actualizaciones en tiempo real, recordatorios y citas de seguimiento.17 Además, debe ser racionalizado para facilitar su uso, permitiendo a los pacientes acceder y navegar por toda su información con sólo pulsar un botón
5. Intercambio de datos integrado
No es ninguna novedad que los servicios que permiten compartir datos son más fáciles y cómodos de usar y, por tanto, esta es la dirección que está tomando la telesalud. Muchas aplicaciones de telesalud están empezando a utilizar y comunicarse con aplicaciones de fitness, por ejemplo, para recopilar información sobre el recuento de pasos y la frecuencia cardíaca directamente desde los dispositivos de la persona. Esto dará a los profesionales sanitarios una visión más completa del estilo de vida de una persona y, junto con los registros sanitarios electrónicos, puede ayudar a crear una imagen más clara de su salud actual.17
Esta idea de compartir datos de forma integrada está impulsada por la interoperabilidad, que es la capacidad de acceder, intercambiar, integrar y utilizar los datos de forma cooperativa y coordinada, dentro de las distintas organizaciones y entre ellas, de forma oportuna y eficaz.18 Cuando los sistemas son interoperables, no sólo comparten los datos, sino que pueden interpretarlos y presentarlos tal y como se reciben, conservando su contexto original.19 Este es el futuro de la telesalud y los proveedores tienen que pasar de limitarse a proporcionar y registrar datos a transmitir estos conocimientos críticos para maximizar los beneficios para los pacientes.
6. Tecnología vestible y monitorización remota del paciente
Como ya se ha dicho, la telesalud se está convirtiendo en algo vital para los pacientes con enfermedades crónicas y, con ello, la idea de compartir datos de forma integrada nos lleva a la siguiente tendencia del futuro: la tecnología portátil. La tecnología portátil existe desde hace décadas y se remonta a 1970, cuando HP creó un reloj de pulsera con calculadora. En 2009 se creó el primer dispositivo de seguimiento de la actividad física Fitbit.20 En 2015 apareció el Apple Watch, que potenció aún más el desarrollo y el crecimiento de las ventas de relojes inteligentes y dispositivos de seguimiento de la actividad física.20 Esto ha permitido al sector de la sanidad iniciar de forma fácil y eficaz la monitorización remota de los pacientes.21 Estos dispositivos permiten a los médicos recopilar datos en tiempo real sobre una serie de medidas de salud, como los niveles de actividad, la frecuencia cardíaca, la presión arterial, los ciclos de sueño y los niveles de glucosa, más directamente de sus pacientes
Con todos estos datos adicionales sobre un día típico en la vida de sus pacientes, los médicos podrán hacer diagnósticos y recomendaciones más perspicaces. La integración de estos dispositivos con una plataforma segura de telesalud y con las historias clínicas electrónicas permitirá a los miembros de los equipos asistenciales intervenir a la primera señal de problemas. Dicho esto, es probable que aumente el uso de la tecnología vestible y que se compartan los datos generados por estos dispositivos con los proveedores de asistencia sanitaria, a condición de que los pacientes confíen en las medidas de seguridad y privacidad establecidas. Además, la tecnología y las plataformas deben ser fáciles de usar para garantizar una fácil integración en la vida diaria del paciente y del médico.2
7. Atención pediátrica a distancia cómoda
Vigilar a un niño enfermo nunca es fácil. Los niños suelen ser buenos enmascarando sus síntomas, tienen dificultades para comunicarse y a menudo se vuelven tímidos o se asustan ante el personal médico.23 Esto se vuelve especialmente difícil para aquellos que necesitan un seguimiento a largo plazo. Pero, con el uso de la telesalud, resulta más cómodo para los padres y puede reducir los costes de una atención de alta calidad.24
La telesalud pediátrica antes de la pandemia ya experimentaba un crecimiento, pero se cree que éste se generalizará en los próximos años. Esto se debe a que las próximas generaciones de padres están más acostumbradas a utilizar la tecnología virtual que las anteriores.22 Además, hay un aumento de los servicios de telesalud dirigidos a los jóvenes, por ejemplo, el desarrollo de la fisioterapia virtual diseñada para imitar los videojuegos.25 En general, es probable que la adopción de la telesalud para la atención pediátrica siga creciendo de forma significativa en los próximos años.26
8. Inversiones en tecnología
Por último, la telesalud no será posible sin la infraestructura tecnológica que la respalde, por lo que es necesario realizar más inversiones. El uso de herramientas digitales de salud está en constante evolución, desde las aplicaciones de seguimiento de la COVID-19, pasando por los rastreadores de bienestar, hasta las aplicaciones de telesalud y salud virtual, todas ellas accesibles desde la comodidad del hogar.19 En lo que respecta a la telesalud, las inversiones en conocimientos y tecnología permitirán iniciativas y aplicaciones más eficaces.6 La telesalud abarca un cambio hacia un enfoque más eficaz y centrado en el paciente, tanto en lo que respecta a la prestación de niveles de atención específicos y receptivos donde los pacientes prefieren, como a la reducción de las presiones sobre el personal sanitario.19
No hay suficientes profesionales sanitarios y desde hace tiempo hay escasez de mano de obra, lo que se puso de manifiesto durante la pandemia.19 Las inversiones en tecnología que respalden el crecimiento de la telesalud reducirán aún más la presión sobre la mano de obra y les permitirán prestar una mejor atención
La telesalud ha llegado para quedarse
Estas son las tendencias clave que han quedado claras desde la adopción generalizada de los servicios de telesalud en los últimos 18 meses. La telesalud proporciona al sector sanitario tantas ventajas que, aunque estamos empezando a ver el final de esta pandemia, la utilización de esta revolucionaria tecnología continuará en el futuro
La telesalud no sólo ha demostrado ser más conveniente para los pacientes, sino que tiene el potencial de proporcionar muchos más beneficios, como mejorar la salud pública, mejorar el acceso a la atención, aliviar la presión sobre el personal sanitario y ayudar a reducir el estrés financiero
La telesalud ha sido la salvación del sector sanitario durante la pandemia, pero ahora que empezamos a avanzar, lo que está claro es que la telesalud ha llegado para quedarse.