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Desinfección: Soluciones para evitar la propagación de patógenos

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La desinfección y la esterilización son la forma más fiable y mejor de garantizar la seguridad del paciente en los entornos sanitarios. Ya sea en el punto de atención, cuando el paciente se encuentra en el hospital o en la consulta médica, o en cualquier lugar donde se fabriquen y envasen dispositivos médicos en un entorno estéril, la transmisión de patógenos y microorganismos a través de superficies, objetos o manos contaminadas puede tener graves consecuencias para la salud.

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Los entornos hospitalarios requieren un cuidado y una diligencia especiales, ya que se trata de zonas muy transitadas. Aparte del personal del hospital y de los pacientes en régimen ambulatorio o de hospitalización, son sobre todo los visitantes del hospital los que pueden ser reservorios de patógenos infecciosos. Muchos pueden introducir bacterias resistentes a los antibióticos sin siquiera saberlo. Aunque no enfermen, pueden transmitir los gérmenes a otras personas menos afortunadas.

Sin una desinfección higiénica periódica de las manos, estos patógenos pueden propagarse de persona a persona a través de superficies que se tocan con frecuencia, como los pomos de las puertas, los interruptores de la luz o los botones del ascensor. Los pacientes con el sistema inmunitario debilitado por los tratamientos son más susceptibles a estos gérmenes, que pueden desencadenar infecciones graves que no son tratables y pueden causar la muerte.

Esto pone de manifiesto el mayor reto en lo que respecta a la higiene hospitalaria eficaz: para evitar la propagación de patógenos, todas las superficies de contacto deben limpiarse y desinfectarse con frecuencia. Aunque esto ya es una práctica habitual en los entornos hospitalarios, es un proceso que requiere mucho tiempo y trabajo. Además, esta tarea siempre es susceptible de cometer errores o negligencias, por lo que las soluciones que ayudan a las personas con estas responsabilidades y mantienen la calidad de la desinfección y la consistencia de la limpieza pueden ofrecer una ayuda inestimable en este entorno.

La desinfección no tiene por qué implicar un trabajo manual

Varios institutos Fraunhofer se han unido en el proyecto conjunto "MobDi - Mobile Disinfection" para desarrollar un robot móvil. Armado con varias herramientas, pronto podría asumir esta responsabilidad.

La Dra. Kristina Lachmann y su equipo del Instituto Fraunhofer de Ingeniería de Superficies y Películas Finas IST han diseñado una herramienta respectiva para el robot que no limpia, sino que utiliza plasma a presión atmosférica para desinfectar las superficies contaminadas: "Se crean aplicando un voltaje muy alto a un gas a presión atmosférica. Esto hace que los átomos del gas se dividan en iones, electrones y radicales", explica en nuestra entrevista con MEDICA-tradefair.com. "Los radicales rompen los enlaces de las moléculas orgánicas. Al mismo tiempo, el plasma se ilumina. Esto crea una radiación UV, que daña las células o destruye su ADN"

Esto no sólo protege al personal del hospital del riesgo de infección, sino que también elimina el uso de un trapo o paño, que puede propagar potencialmente gérmenes y patógenos, añade Lachmann. Sin embargo, todavía hace falta una investigación concluyente para determinar si este método puede sustituir a la desinfección por remojo y bayeta o, al menos, ser un complemento viable.

Desde 2020, el Hospital Universitario de Ratisbona participa en el proyecto "PACMAN", que va un paso más allá. En él se está probando un recubrimiento antimicrobiano para superficies de contacto de uso frecuente con alto riesgo de transmisión de patógenos. Cuando la superficie recubierta se expone a la luz, genera un oxígeno altamente reactivo (oxígeno singlete) que mata las bacterias y los virus de la superficie. "La ventaja de un revestimiento antimicrobiano es que proporciona una protección permanente sin la intervención del personal. Esto significa también que la desinfección de la superficie y el revestimiento antimicrobiano se complementan", afirma el profesor Wolfgang Bäumler en una entrevista con MEDICA-tradefair.com. El proyecto continuará hasta octubre de 2023.

La pandemia de la COVID-19 afecta también, obviamente, a las cuestiones de desinfección y esterilización. El proyecto "MobDi" se puso en marcha explícitamente para abordar los problemas de la pandemia, mientras que la investigación "PACMAN" aún no había tenido en cuenta la enfermedad infecciosa. Sin embargo, los resultados intermedios también indican la eficacia del revestimiento antimicrobiano contra el SARS-CoV-2.

Para cumplir los requisitos de seguridad y fiabilidad, el sector industrial también debe tener en cuenta el riesgo de infección. Esto se refiere especialmente a los productos delicados, como los implantes y el instrumental quirúrgico. En una entrevista de MEDICA-tradefair.com, Frank Wolfsdorf, director de ventas de SOMI medical GmbH, explica: "Tomamos múltiples contramedidas para reducir el riesgo de infecciones manteniendo un nivel de higiene más alto, proporcionando equipos de protección personal y realizando pruebas diarias de COVID-19. También utilizamos recursos como limpiadores de aire en muchas habitaciones. Éstos liberan iones negativos en el aire y activan el oxígeno para eliminar los virus, las bacterias y los gérmenes y eliminar las partículas del aire"

La desinfección inteligente debe ahorrar tiempo

Tanto si el riesgo de infección grave procede del coronavirus como de los patógenos multirresistentes: los especialistas en higiene luchan contra un enemigo tan incansable como omnipresente y capaz de multiplicarse. Frente a estas dificultades, es dudoso que tengan alguna posibilidad de ganarla. Por ello, es aún más importante utilizar soluciones que ahorren tiempo y hagan más productivo su trabajo mientras intentan mantener la seguridad de los pacientes a diario.

Pero no se necesitan necesariamente soluciones de alta tecnología como el robot de desinfección del proyecto MobDi. Otras ideas más sencillas, como el revestimiento antimicrobiano del proyecto PACMAN, pueden ser igualmente un componente clave de la higiene hospitalaria y liberar un tiempo valioso para que los expertos se ocupen de tareas importantes que deberían realizar los humanos.