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Se confirma la relación genética entre el Alzheimer y los trastornos intestinales
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Una investigación dirigida por el Centro de Salud de Precisión de la Universidad Edith Cowan de Perth confirma un vínculo genético entre la enfermedad de Alzheimer y los trastornos del tracto gastrointestinal.
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Los científicos que llevaron a cabo el estudio afirman que sus resultados muestran un solapamiento de susceptibilidad compartido para los dos tipos de afecciones a través de varios genes relacionados con vías como el metabolismo de los lípidos y la autoinmunidad.
Como se indica en el artículo de Communications Biology que describe este trabajo, cada vez son más los estudios que informan de la coexistencia de la demencia, en particular la enfermedad de Alzheimer, y ciertas afecciones gastrointestinales como la gastritis y la enfermedad por reflujo gastroesofágico. Otros estudios también han relacionado los cambios en el microbioma intestinal con afecciones neurodegenerativas como la enfermedad de Alzheimer.
Para investigar por qué estas dos afecciones pueden estar relacionadas, Simon Laws, profesor de la Universidad Edith Cowan, y sus colegas llevaron a cabo un estudio para evaluar si las dos afecciones tienen susceptibilidades genéticas compartidas.
Analizaron los resultados de varios estudios de asociación de todo el genoma de la enfermedad de Alzheimer y una serie de trastornos intestinales diferentes que incluían hasta 456.327 personas.
Los resultados revelaron un solapamiento significativo entre la susceptibilidad genética al Alzheimer y también a la enfermedad de reflujo gastroesofágico, la enfermedad de úlcera péptica, la gastritis-duodenitis, el síndrome del intestino irritable y la diverticulosis, pero no a las enfermedades intestinales inflamatorias. Entre los genes con variantes vinculadas a la susceptibilidad a la enfermedad de Alzheimer y a la enfermedad intestinal se encontraban: PDE4B, BRINP3, ATG16L1, SEMA3F, HLA-DRA, SCARA3, MTSS2, PHB y TOMM40.
"El estudio aporta una nueva visión de la genética que subyace a la coexistencia de la enfermedad de Alzheimer y los trastornos intestinales", afirmó el primer autor, Emmanuel Adewuyi, investigador postdoctoral en Edith Cowan, en un comunicado de prensa.
"Esto mejora nuestra comprensión de las causas de estas afecciones e identifica nuevos objetivos a investigar para detectar potencialmente la enfermedad antes y desarrollar nuevos tratamientos para ambos tipos de afecciones"
Las vías compartidas identificadas en la investigación incluyen las relacionadas con el metabolismo de los lípidos, la autoinmunidad y la evasión inmunitaria (señalización PD-1), y el metabolismo de los inhibidores de la lipasa y las estatinas, entre otras.
"Aunque es necesario seguir estudiando los mecanismos compartidos por ambas enfermedades, hay pruebas de que el colesterol elevado puede trasladarse al sistema nervioso central, lo que da lugar a un metabolismo anormal del colesterol en el cerebro", señaló Adewuyi.
"También hay pruebas que sugieren que los lípidos sanguíneos anormales pueden ser causados o empeorados por las bacterias intestinales (H. pylori), todo lo cual apoya las funciones potenciales de los lípidos anormales en la enfermedad de Alzheimer y los trastornos intestinales"