10 tendencias que merecen atención

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Sabiendo que sólo los tontos predicen el futuro y sabiendo además que yo también lo soy (mis hijos me lo recuerdan a menudo), voy a hacer un intento de predecir 10 tendencias de la profesión veterinaria. Pero primero, echemos un vistazo al presente. Tenemos mucho de lo que enorgullecernos, empezando por la mayor esperanza de vida de las mascotas, el creciente vínculo humano-animal, los avances en medicina, el número récord de mascotas, menos eutanasias y refugios vacíos. La lista es interminable. Pero, ¿qué nos espera? Peter Drucker, el famoso educador, autor y consultor, dijo: "Lo único que sabemos del futuro es que será diferente"

No va a desaparecer. El número de mascotas y su esperanza de vida seguirán aumentando, y el amor de Estados Unidos por los animales de compañía seguirá creciendo. La comunidad inversora espera que el sector de los animales de compañía se triplique en los próximos 10 años. Se triplicará La Oficina de Estadísticas Laborales de EE.UU. prevé un crecimiento del 17% en los puestos de trabajo de la profesión veterinaria.

Los sensores medirán y controlarán continuamente múltiples datos fisiológicos, de estilo de vida y nutricionales. Las mascotas estarán conectadas a comederos, bebederos, cajas de arena, dispositivos portátiles, cámaras, correas y juguetes inteligentes que controlarán continuamente el estado de los animales. Los datos se recopilarán y analizarán, y los dispositivos alertarán a los dueños de las mascotas y a los profesionales veterinarios sobre anomalías, tendencias perturbadoras, progresos del tratamiento, emergencias y signos de enfermedad precoz. Se señalarán los parámetros que se salgan de la frecuencia cardiaca normal, el nivel de actividad, los patrones de descanso, las calorías quemadas, la forma de andar, la expresión facial, el cortisol y otros. Imagínese una época en la que los productos para mascotas conectados traduzcan el habla de los perros al inglés, como con el perro Doug en la película "Up": "¡Hola, acabo de conocerte y te quiero!"

El vínculo humano-animal se estrechará con el reconocimiento de los beneficios para la salud asociados a la tenencia de animales de compañía. Un nuevo estudio del Human Animal Bond Research Institute muestra que el 95% de los propietarios de animales de compañía de todo el mundo los consideran parte de la familia. La investigación del HABRI indica además que el 87% de los propietarios de mascotas creen que tener un animal de compañía mejora su salud mental o física. Además, el 20% de los propietarios de animales de compañía afirman que su médico o terapeuta les recomendó tener un animal de compañía, y el 91% dicen que es más probable que mantengan la salud de su mascota cuando entienden mejor el vínculo humano-animal. Como profesionales veterinarios, somos una parte fundamental del cuidado de la salud familiar.

La educación veterinaria pasará de basarse en el conocimiento a basarse en la competencia. Veremos un aprendizaje asíncrono, más programas clínicos híbridos-distribuidos, admisiones duales, un cambio hacia las aulas virtuales y más atención a las habilidades clínicas y profesionales prácticas, como la comunicación. Las facultades de veterinaria nuevas y emergentes adoptarán estos nuevos modelos. Seguiremos disfrutando de cifras récord de solicitudes de estudiantes a medida que aumente el valor de los animales de compañía en las familias.

Los hospitales veterinarios se consolidarán. De los más de 60 que existen en la actualidad en EE.UU. surgirán cinco o seis consolidadores principales. La inversión en todo lo relacionado con los animales de compañía continuará. Los grupos veterinarios cotizarán en bolsa. Los consultorios generales independientes seguirán constituyendo un número significativo de hospitales veterinarios, pero su cuota de ingresos seguirá disminuyendo. ¿Es bueno? ¿Malo? Veo un poco de ambas cosas.

Afortunadamente, el legado de la generación de la explosión demográfica de "primero el trabajo y luego la vida" será sustituido por la sabiduría de las generaciones posteriores de "primero la vida y luego el trabajo". Surgirán más opciones de trabajo desde casa para los profesionales veterinarios. El bienestar en el lugar de trabajo se convertirá en el objetivo principal de los empleadores progresistas que deseen atraer y retener a grandes talentos. Las necesidades personales tendrán más peso que las exigencias profesionales. Pedir ayuda en el trabajo será una acción segura.

Pasaremos de nuestras raíces históricas de atención generalizada a todas las criaturas grandes y pequeñas a un futuro de atención segmentada a algunas criaturas grandes y pequeñas. Con esto quiero decir que una profesión que históricamente ha dependido de la generalización (atención primaria para todas las criaturas) se segmentará en nuevos modelos de atención para sectores desatendidos, como la atención urgente, la atención dental exclusiva, la atención por técnico/enfermera veterinaria, la esterilización/castración, el bienestar sin cita previa, la práctica comunitaria sin ánimo de lucro, la telesalud, el servicio de conserjería, la atención móvil y mucho más. Esto es bueno. Ofreceremos a consumidores y proveedores más opciones y reduciremos las barreras a la atención sanitaria.

Los futuros dueños de animales insistirán en que sus mascotas no enfermen. Les gustarán los cuidados preventivos. A menudo, la atención se prestará a través de planes de bienestar y se mejorará con tecnología portátil. Los clientes estarán más motivados para dar prioridad a la salud de sus mascotas mediante exámenes periódicos, consejos nutricionales y de comportamiento, prevención de parásitos e inmunizaciones. Por fin pasaremos de una atención principalmente reactiva a una atención principalmente proactiva. Por cierto, a medida que adoptemos la atención preventiva, las mascotas vivirán más tiempo y más sanas, y mitigaremos la sobrecarga experimentada en la atención de urgencias y emergencias.

Los técnicos/enfermeros veterinarios ganarán el estatus que merecen. Un enfoque de la atención médica veterinaria basado en el trabajo en equipo superará por fin el antiguo modelo de un médico, una sala de reconocimiento y un paciente cada 20 minutos. Nuevos profesionales de nivel intermedio se unirán al equipo. Aunque tarde, la profesión veterinaria adoptará la atención sanitaria en equipo como han hecho todas las demás profesiones sanitarias.