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#Novedades de la industria
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Este nuevo robot puede oler
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Un avance tecnológico biológico ha permitido a un robot oler utilizando un sensor biológico. La sensibilidad registrada por el sensor biológico es 10.000 veces superior a la de los dispositivos electrónicos existentes. El trabajo futuro se centra en dotar al robot de la capacidad de navegación no sólo para encontrar la fuente de olor, sino también para identificarla.
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En una primicia científica, un robot de la Universidad de Tel Aviv ha heredado otro de los cinco sentidos humanos: el olfato. El robot puede oler gracias a un sensor biológico. El sensor envía señales eléctricas como respuesta a la presencia de un olor cercano, que el robot puede detectar e interpretar.
En el estudio, los investigadores conectaron con éxito el sensor biológico a un sistema electrónico. Mediante un algoritmo de aprendizaje automático, el robot fue capaz de identificar olores con un nivel de sensibilidad 10.000 veces superior al de un dispositivo electrónico de uso común.
"El sistema nos permitió detectar cada olor al nivel del órgano sensorial primario del insecto. Después, en un segundo paso, utilizamos el aprendizaje automático para crear una 'biblioteca' de olores", explica Yossi Yovel, autor del estudio. "Fuimos capaces de caracterizar ocho olores, como geranio, limón y mazapán, de forma que nos permitieran saber cuándo se presentaba el olor a limón o a mazapán. De hecho, una vez terminado el experimento, seguimos identificando otros olores diferentes e inusuales, como varios tipos de whisky escocés."
El equipo afirma que el dispositivo puede detectar cada olor al nivel del órgano sensorial primario del insecto, que es exactamente lo que pretendían los investigadores.
"La naturaleza está mucho más avanzada que nosotros, así que deberíamos utilizarla", afirma el investigador Ben Maoz. "El principio que hemos demostrado puede utilizarse y aplicarse a otros sentidos, como la vista y el tacto. Por ejemplo, algunos animales tienen habilidades asombrosas para detectar explosivos o drogas; la creación de un robot con nariz biológica podría ayudarnos a preservar vidas humanas e identificar criminales de una forma que hoy no es posible. Algunos animales saben detectar enfermedades. Otros pueden percibir terremotos. El cielo es el límite"
Los investigadores afirman que, a la vista del éxito de su investigación, esta tecnología podría utilizarse también en el futuro para identificar explosivos, drogas, enfermedades y otros objetos. En futuros trabajos, los investigadores planean dotar al robot de una capacidad de navegación que le permita localizar la fuente del olor y, más adelante, su identidad.