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Polvo metálico, sílice cristalina, polvo de resinas y vapores químicos: Por qué la calidad del aire es esencial en los laboratorios de prótesis dentales

Un reto para la prevención de enfermedades profesionales en los protésicos dentales

En los laboratorios de prótesis dentales, la calidad del aire es un tema a menudo pasado por alto, a pesar de que los profesionales están expuestos a diario a diversos contaminantes. Los procesos involucrados en la fabricación y el acabado de las prótesis dentales liberan sustancias químicas y partículas finas que pueden ser perjudiciales para la salud. Cada actividad en el laboratorio está expuesta a la liberación de contaminantes específicos, dependiendo de los materiales manipulados (resinas, metales, cerámicas) y las herramientas utilizadas (fresas, pulidoras, hornos). Sin un control adecuado de la calidad del aire, los laboratorios dentales pueden convertirse en entornos en los que pueden desarrollarse enfermedades laborales graves. En este artículo, destacaremos los principales riesgos para la salud a los que se enfrentan los técnicos dentales y la importancia de prevenir estos peligros.

Los peligros de la calidad del aire en los laboratorios dentales

Los técnicos dentales están expuestos a diversos contaminantes generados por los diferentes productos y procesos que se utilizan en su trabajo. Los contaminantes más comunes incluyen:

• Partículas finas: Se generan durante el pulido, el desgaste o el corte de prótesis y pueden penetrar profundamente en el sistema respiratorio, provocando enfermedades pulmonares.

• Vapores químicos: Sustancias como el metacrilato de metilo (MMA) presente en las resinas acrílicas pueden causar irritación en los ojos, la nariz y la garganta y, con la exposición prolongada, problemas respiratorios y enfermedades más graves.

• Polvo metálico: Utilizado en la producción de coronas y puentes, este polvo puede contener cobalto, níquel o cromo, todos ellos conocidos alérgenos y sustancias tóxicas.

Según el Instituto Nacional de Investigación y Seguridad (INRS) de Francia, “la inhalación de estos polvos o vapores puede llevar a enfermedades profesionales como el asma, las alergias respiratorias, la silicosis o enfermedades pulmonares crónicas.”

Tipos de contaminantes según las actividades del laboratorio

Cada fase en la fabricación de una prótesis dental expone a los técnicos a diferentes contaminantes generados por los productos y los procesos de trabajo. A continuación, se presenta un resumen de los principales contaminantes asociados con actividades específicas en los laboratorios dentales:

1. Preparación y polimerización de resinas acrílicas

o Principales contaminantes: Metacrilato de metilo (MMA), formaldehído, acetona, tolueno.

o Riesgos asociados: Estos compuestos orgánicos volátiles (COV) se liberan durante la manipulación y el curado de resinas utilizadas en la creación de prótesis removibles y núcleos de relleno. El metacrilato de metilo, una de las sustancias más utilizadas, es conocido por sus efectos irritantes en los ojos, la piel y el sistema respiratorio. La exposición prolongada también puede provocar reacciones alérgicas y enfermedades respiratorias crónicas.

2. Desgaste y pulido de prótesis

o Principales contaminantes: Partículas finas y ultrafinas (PM10, PM2.5), sílice cristalina, cobalto, níquel, cromo.

o Riesgos asociados: El pulido, corte o esmerilado de las partes protésicas genera grandes cantidades de polvo fino y ultrafino, especialmente cuando se trabaja con aleaciones metálicas. La sílice cristalina, que se encuentra en algunos materiales abrasivos, es especialmente peligrosa. Inhalar estos polvos puede provocar graves enfermedades respiratorias como la silicosis, una enfermedad pulmonar incurable, o incluso cánceres respiratorios. Además, el cobalto, el níquel y el cromo son metales comúnmente usados en aleaciones dentales, clasificados como carcinógenos y conocidos por causar enfermedades pulmonares y reacciones alérgicas en la piel.

3. Cocción y tratamiento de cerámica dental

o Principales contaminantes: Óxido de zirconio, óxido de aluminio, monóxido de carbono (CO), óxidos de nitrógeno (NOx).

o Riesgos asociados: Cuando se cocinan coronas y puentes fabricados con cerámica, se liberan vapores y partículas finas en el aire. El óxido de zirconio, utilizado en la creación de prótesis cerámicas, genera polvo fino durante el pulido y el desgaste. Estas partículas pueden irritar el sistema respiratorio y causar enfermedades pulmonares crónicas. Además, la cocción a altas temperaturas en los hornos dentales libera monóxido de carbono y óxidos de nitrógeno, que son perjudiciales tanto para el sistema cardiovascular como para el respiratorio.

4. Manipulación de aleaciones metálicas para coronas y puentes

o Principales contaminantes: Polvo metálico, plomo, cadmio, mercurio.

o Riesgos asociados: Durante la fundición y el desgaste de las aleaciones metálicas, los técnicos están expuestos al polvo metálico que a menudo contiene plomo, cadmio o mercurio. Estas sustancias son altamente tóxicas y pueden causar trastornos neurológicos, enfermedades renales y cáncer. La exposición crónica al plomo, por ejemplo, se ha relacionado con trastornos del sistema nervioso y puede afectar el desarrollo cognitivo.

5. Limpieza y desinfección de prótesis e instrumentos

o Principales contaminantes: Desinfectantes que contienen glutaraldehído, hipoclorito sódico, peróxido de hidrógeno.

o Riesgos asociados: El uso de estos desinfectantes puede liberar vapores irritantes que causan condiciones respiratorias agudas y crónicas, como el asma ocupacional. El glutaraldehído, en particular, es reconocido como altamente irritante y sensibilizante. El manejo incorrecto sin la protección adecuada puede llevar a reacciones alérgicas graves y problemas respiratorios a largo plazo.

Enfermedades profesionales asociadas con la calidad del aire

La mala calidad del aire en los laboratorios dentales es una de las principales causas de enfermedades profesionales. Según las estadísticas del INRS, las enfermedades respiratorias representan una proporción significativa de los casos reportados en este sector. Algunas de las patologías más comunes incluyen:

• Enfermedades respiratorias crónicas: La inhalación prolongada de polvo fino, metálico o de sílice favorece el desarrollo de afecciones respiratorias como bronquitis crónica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) e incluso cánceres del tracto respiratorio. Según el INRS, las enfermedades broncopulmonares relacionadas con la inhalación de polvo mineral (como la sílice) son particularmente comunes entre los trabajadores de los laboratorios dentales. En Francia, la EPOC es la tercera causa principal de muerte, y sus vínculos con las exposiciones laborales están siendo cada vez más documentados.

• Alergias y asma ocupacional: Los compuestos químicos en las resinas, los metales y los desinfectantes pueden causar reacciones alérgicas graves. El asma ocupacional, cada vez más diagnosticada en este sector, suele ser desencadenada por la exposición repetida a COVs o polvos irritantes.

• Dermatosis ocupacionales: El contacto directo o la inhalación de productos químicos en las resinas acrílicas puede causar dermatitis de contacto o eccema crónico, lo que puede ser particularmente problemático para los técnicos.

• Cánceres ocupacionales: Algunas sustancias presentes en los laboratorios dentales, como el níquel y el cromo, son reconocidas como carcinógenas por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC). La exposición prolongada a estos metales aumenta el riesgo de cáncer en el tracto respiratorio.

Soluciones para mejorar la calidad del aire

Dado la variedad de contaminantes presentes en los laboratorios de prótesis dentales, es esencial adoptar un enfoque integral para la prevención de riesgos. A continuación, se detallan las principales medidas preventivas a tener en cuenta:

1. Sistemas de ventilación adecuados: Instalar sistemas de ventilación mecánica controlada (VMC) ayuda a renovar el aire y a eliminar los contaminantes del ambiente. La extracción localizada de aire mediante campanas de aspiración o sistemas de aspiración personal puede reducir la concentración de contaminantes en el aire.

2. Uso de equipos de protección personal (EPP): El uso de mascarillas de alta filtración (como las FFP2) y guantes de protección durante la manipulación de resinas y materiales metálicos es fundamental para reducir la exposición a partículas y vapores peligrosos.

3. Filtración de aire: Los sistemas de filtración de aire equipados con filtros HEPA son eficaces para retener las partículas finas y los compuestos químicos. Estos sistemas, como el EOLIS Air Manager, también son capaces de adaptarse a las necesidades específicas de un laboratorio, monitorizando la calidad del aire en tiempo real y ajustando la purificación según el tipo de contaminante.

4. Formación y sensibilización: Los técnicos deben recibir formación sobre los riesgos asociados con los contaminantes del aire y las buenas prácticas para minimizarlos.

5. Mantenimiento de equipos y materiales: Un mantenimiento adecuado de las herramientas y el equipo de trabajo puede reducir la generación de partículas y vapores peligrosos.

EOLIS Air Manager: Una solución avanzada para los laboratorios dentales

NatéoSanté ofrece soluciones de purificación del aire, como el modelo EOLIS Air Manager, diseñado específicamente para los laboratorios de prótesis dentales. Este purificador de aire ofrece una filtración de alta calidad para:

• Capturar partículas finas y metálicas: Gracias a un filtro HEPA de calidad médica, retiene hasta el 99,97 % de las partículas finas, reduciendo así los riesgos de enfermedades respiratorias.

• Neutralizar los COV y los vapores tóxicos: Un filtro de carbón activado absorbe eficazmente los compuestos orgánicos volátiles (COV), como el metacrilato de metilo, así como los gases tóxicos.

• Destruir los patógenos: Gracias a la tecnología UV-C, el purificador elimina los microorganismos como bacterias y virus, garantizando un entorno de trabajo más saludable.

• Gestión inteligente de la contaminación: El sistema ajusta automáticamente su velocidad de filtración según los niveles de contaminación, garantizando así una calidad del aire óptima.

Conclusión

La calidad del aire en los laboratorios de prótesis dentales es un tema crítico que no debe ser descuidado. La exposición a contaminantes en el aire puede llevar a enfermedades respiratorias crónicas, reacciones alérgicas y problemas de salud a largo plazo para los técnicos. Al emplear ventilación adecuada, sistemas de filtración y medidas de protección, es posible minimizar los riesgos asociados con una mala calidad del aire. El EOLIS Air Manager proporciona una solución avanzada para mejorar la calidad del aire en estos entornos, asegurando la salud y seguridad de los técnicos dentales.

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Información

  • Le Pont Béranger, 44680 Saint-Hilaire-de-Chaléons, France
  • NatéoSanté