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MONITORES DE CALIDAD MÉDICA EN LA ATENCIÓN SANITARIA: UNA MIRADA MÁS CERCANA
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Cómo elegir el monitor médico adecuado para sus departamentos
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Los ordenadores médicos son herramientas asombrosas. Con ellos, los proveedores y el personal sanitario pueden acceder a datos que van desde los historiales médicos de los pacientes hasta los últimos resultados de análisis de sangre. La visualización y el acceso a estos datos se realizan a través de un monitor o una pantalla de calidad médica.
El artículo de hoy trata de esta pieza fundamental del equipamiento médico. ¿En qué se diferencia de la pantalla plana de su escritorio, por ejemplo? ¿Por qué existen estas diferencias? Repasamos cómo se utilizan las pantallas médicas en la atención sanitaria y cómo se construyen para su departamento o uso específico.
Por último, ofrecemos una lista de preguntas que debe plantearse a la hora de adquirir el monitor médico adecuado para su organización.
¿Qué es un monitor médico?
Los monitores médicos están diseñados específicamente para cumplir los exigentes requisitos del sector sanitario. Están certificados para la seguridad y el uso en las proximidades de los pacientes, cuentan con carcasas selladas y ofrecen una calidad de imagen específica para cada departamento. Estas pantallas especializadas se diferencian de los monitores de consumo convencionales en varios aspectos.
En conjunto, ayudan al personal sanitario a ofrecer la mejor experiencia posible de atención al paciente.
Características que definen los monitores de calidad médica
Ya hemos tratado en otras ocasiones las diferencias entre los monitores de calidad médica y los monitores de consumo. Algunas de estas características son:
Calidad de imagen: Los especialistas médicos, como los radiólogos, toman decisiones de vida o muerte sobre una imagen de rayos X o resonancia magnética. Cualquier imagen que se muestre en sus monitores debe tener una claridad, resolución, calidad, color y contraste excepcionales. Esto les permite detectar sombras u otros signos visuales sutiles que podrían ser un tumor maligno.
Cumplimiento de la normativa: El sector médico está muy regulado. Los fabricantes de equipos médicos se aseguran de que sus productos se sometan a pruebas y cuenten con la certificación IEC 60601-1 para la seguridad del paciente. Los monitores de consumo carecen de estas certificaciones.
Durabilidad y fiabilidad: Las instalaciones médicas, como los hospitales, están abiertas 24 horas al día, 7 días a la semana. Los productos electrónicos deben funcionar de forma fiable en estos entornos, algo para lo que no están preparados los monitores de consumo.
Higiene: el personal de los hospitales dedica mucho tiempo y esfuerzo a mantener las instalaciones libres de gérmenes. Los monitores de grado médico con clasificación IP65 están sellados para resistir materiales de limpieza agresivos.
Diseñados específicamente: Los monitores quirúrgicos deben ser nítidos a la luz intensa que se utiliza en los quirófanos. Además, algunos monitores de radiología deben mostrar hasta 65.536 tonos de gris para exámenes específicos. Los monitores de consumo polivalentes son demasiado generalistas para satisfacer los requisitos específicos de cada especialidad.
Rentabilidad: Los monitores de consumo son inicialmente menos costosos por unidad que los monitores médicos. Esa ventaja de precio desaparece con el tiempo, a medida que los modelos comerciales se estropean y deben repararse o sustituirse.
Conclusión: Los monitores comerciales tienen demasiadas limitaciones para satisfacer las elevadas exigencias de la sanidad.
Resolución y calidad de imagen
La resolución es el nivel de detalle que contiene una imagen. Este nivel se mide en píxeles (elementos de imagen), la unidad más pequeña que compone una imagen digital. Cuantos más píxeles haya en un espacio de imagen determinado, mayor será su resolución y mayor la calidad de la imagen.
Los monitores de calidad médica son conocidos por su calidad de imagen superior, que suele evaluarse en función de la precisión del color, la luminancia, el brillo, la calibración y la coherencia. Estas normas son esenciales para las pantallas de diagnóstico médico utilizadas en radiología.
La especialidad de radiología es bien conocida por su uso de monitores, que exigen imágenes consistentes de la más alta calidad. Los monitores médicos utilizados para otros fines y departamentos no exigen que tengan esos niveles.
Precisión del color: Se refiere a lo bien que la pantalla médica reproduce correctamente los colores previstos de una imagen. La precisión del color incluye la escala de grises, es decir, los tonos de gris entre el blanco y el negro. Esto es muy importante en radiología, ya que las radiografías se representan en escala de grises. Los monitores médicos pueden mostrar miles de millones de colores según el modelo.
El espacio de color, el nivel delta E (dE) y la gama de colores son formas de medir la precisión del color de un monitor concreto. Muchos departamentos de informática sanitaria utilizan la resolución, medida en megapíxeles (MP), para determinar la calidad de visualización de la imagen.
En lo que respecta a las imágenes médicas, el Colegio Americano de Radiología sugiere una resolución mínima del monitor de 3 MP para imágenes de rayos X, resonancia magnética, tomografía computarizada y ecografía. Sin embargo, la ley exige una resolución de 5 MP para las mamografías. Los monitores de calidad médica pueden tener resoluciones inferiores en determinadas especialidades, incluso de hasta 2 MP.
Luminancia y brillo: La luminancia es la luz que crea la fuente luminosa. El brillo de esa luz se denomina luminosidad.
El brillo se mide en candelas por metro cuadrado (cd/m2). El espectador puede distinguir mejor las zonas oscuras de una imagen si el brillo es mayor.
Las pantallas de cristal líquido (LCD) para diagnóstico médico deben tener una luminancia y un brillo elevados. La luminancia máxima, o Lmax, debe ser de al menos 250 cd/m2 para imágenes de ultrasonidos, fluoroscopia y medicina nuclear. Esta cifra se eleva a 350 cd/m2 para radiografías, TC y RM. Las imágenes de mamografías deben verse en monitores con al menos 400 cd/m2.
Los monitores de calidad médica utilizados principalmente para otros fines, como la monitorización de pacientes, no necesitan cumplir estas normas de iluminación.
Los monitores médicos deben calibrarse para garantizar que sus colores coincidan con el modelo de color RGB de DICOM. Esta calibración es esencial porque garantiza que los profesionales médicos vean imágenes y detalles uniformes, tanto si las ven en un monitor médico de hospital como en una pantalla de oficina. El personal informático sanitario puede realizar la calibración manualmente, pero algunas pantallas de gama alta incorporan software y hardware, incluidos sensores de luz, para la autocalibración. Es importante tener en cuenta que, aunque estas pantallas avanzadas suelen encontrarse en los departamentos de radiología, puede que no sean necesarias en otros entornos médicos.
Normas reglamentarias para pantallas médicas
Como ya se ha comentado, los monitores médicos están muy regulados en comparación con los monitores de consumo. Dos de ellas son la conformidad con DICOM y la calidad médica.
DICOM es el acrónimo de Digital Imaging and Communications in Medicine. Es la norma internacional de imágenes médicas e información relacionada (ISO 12052). Por ejemplo, un monitor compatible con DICOM mostrará una reproducción precisa de las imágenes en escala de grises de una resonancia magnética (DICOM parte 3.14). Esto es independiente de la tarjeta gráfica del monitor o del ordenador de grado médico conectado.
Grado médico significa que la pantalla médica ha sido construida, probada y certificada para un uso seguro cerca del paciente según las normas IEC 60601 y UL/cUL 60601-1.
Otras normas son el cumplimiento de la HIPAA para proteger los datos sanitarios personales y la protección contra la penetración (IP65) de polvo y agua. Ambos muestran cómo se fabrican los monitores de grado médico para cumplir las especificaciones del sector sanitario.
Selección del monitor de grado médico adecuado
Ahora ya conoce bien los ordenadores de uso médico. ¿Cuáles son los factores más importantes que debe tener en cuenta a la hora de adquirirlos para su grupo sanitario?
Requisitos específicos
¿Se utilizará para revisar imágenes que ayuden en el diagnóstico del paciente? ¿Servirá para consultar los historiales médicos o las constantes vitales del paciente en tiempo real?
Recuerde que cada departamento utiliza sus pantallas médicas de forma diferente. Estas necesidades requieren una calidad de imagen, una calibración del color y un brillo diferentes. Incluso puede ser necesario tener en cuenta el deslumbramiento de la pantalla, como en el caso de los monitores quirúrgicos.
Coste
Los monitores de calidad médica son más caros que los que se compran en las tiendas porque están hechos a medida para funcionar en entornos sanitarios duros e implacables. El precio puede aumentar si un departamento como el de radiología tiene necesidades aún más especializadas.
Formación y adaptación del usuario
Es esencial dedicar tiempo y recursos a formar al personal sobre cómo utilizar el nuevo monitor de forma eficaz. Los monitores de calidad médica pueden tener funciones avanzadas que no son evidentes a primera vista, por lo que los miembros del personal deben recibir garantías y orientación sobre su utilización. Por ejemplo, es fundamental informar al personal del sellado IP65 del monitor contra el polvo y la suciedad, que permite utilizar limpiadores de calidad hospitalaria y rociar directamente la pantalla para limpiarla a fondo.
Compatibilidad e integración
Los monitores de calidad médica son los dispositivos de salida de todo lo electrónico, desde los dispositivos médicos hasta los equipos como los PC médicos. Ambos deben conectarse para que los monitores puedan mostrar datos.
Asegúrese de que sus monitores tienen los puertos modernos correctos, como USB-C, y puertos heredados para conectarse a dispositivos hospitalarios antiguos pero que se siguen utilizando (como las máquinas de anestesia antiguas).
Soporte del proveedor
Al comprar monitores de grado médico, es importante considerar sus opciones cuidadosamente. Si bien la compra a revendedores le ofrece una amplia gama de opciones de varios proveedores, también viene con limitaciones. Es posible que estos distribuidores no tengan mucha flexibilidad de precios, ya que suelen estar sujetos a las estrategias de precios de los proveedores con los que trabajan. Además, cuando se trata de personalizar o reparar los monitores, los distribuidores pueden tener capacidades limitadas, ya que dependen de la asistencia y las ofertas de los proveedores.
En cambio, tratar directamente con el fabricante de equipos originales (OEM) ofrece claras ventajas. Los OEM controlan totalmente los precios, las opciones de personalización y la asistencia técnica del producto. Esto significa que todos estos factores son negociables, lo que proporciona más flexibilidad para sus necesidades específicas.
Satisfacer sus necesidades de monitores de grado médico con Cybernet
El mundo de la atención sanitaria es tan único como cualquier otra empresa humana, desde la agricultura hasta la producción de petróleo y gas. Los monitores de calidad médica están diseñados y fabricados para este sector, lo que les permite realizar tareas las 24 horas del día, los 7 días de la semana, que no podrían realizar sus homólogos de consumo.
Póngase en contacto con un profesional del equipo Cybernet para descubrir las innumerables ventajas de los monitores de calidad médica. Nuestros profesionales están deseando profundizar en las ventajas que ofrece un fabricante de diseño original. Entre ellas se incluyen tasas de fallo inferiores al 2%, componentes estándar de calidad militar, un ciclo de vida prolongado y una garantía de 3 a 5 años.
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