Terapia en el hogar

4 razones por las que no debe subestimarse.

Las pautas globales con respecto a la terapia y rehabilitación del dolor están cambiando profundamente.

De hecho, a lo largo de los años, se ha descentralizado un número constante de servicios básicos en el sistema de salud, a favor de la terapia domiciliaria. La pandemia de Covid-19 ha confirmado a nivel mundial esta tendencia, aumentando el número de pacientes que toman su terapia en casa.

Hay varias razones por las que las personas hacen terapia en casa, en lugar de en el hospital. Uno de los más importantes es el dolor crónico que, según estudios de PubMed, afecta a más del 30% de la población mundial y constituye una enorme carga personal y económica.

Hace más de 25 años, comenzamos a atender a personas con enfermedades del sistema musculoesquelético y circulatorio, incluido el dolor crónico.

¿Cómo?

Mejorando su calidad de vida, reduciendo el dolor y aumentando la movilidad en la comodidad de su hogar.

Ofreciéndoles dispositivos médicos seguros y fáciles de usar para la terapia del dolor y la rehabilitación en el hogar.

Si te preguntas qué tipo de enfermedad se puede tratar en casa, aquí tienes algunos ejemplos.

- Artrosis, fracturas e inflamaciones, mediante el uso de dispositivos de magnetoterapia (Terapia PEMF).

- Linfedema, edema e insuficiencia venosa, que se benefician de los efectos de la presoterapia.

- Tendinitis, contracturas musculares y túnel carpiano, pueden ver una mejoría en pocas sesiones gracias a la terapia de ultrasonido.

- Recuperación muscular, tonificación, cervicalgia, se puede tratar con electroterapia.

Hacer terapia domiciliaria es garantía de numerosos beneficios, entre ellos mencionamos los 4 principales.

Comodidad: puedes iniciar tu terapia cada vez que lo desees en cuanto aparezca el dolor. Puedes completar tu viaje terapéutico, cómodamente en el sofá de tu casa y junto a tu familia.

Eficacia: realizar un tratamiento en casa garantiza una mayor regularidad, un aspecto crucial de cualquier proceso de rehabilitación. La regularidad mejora la adherencia y el cumplimiento del tratamiento, garantizando mejores resultados.

Privacidad: el ambiente hogareño te hace sentir más cómodo. Este aspecto no debe subestimarse, ya que no a todo el mundo le gusta hacer terapia en un lugar público.

Comodidad: poseer un dispositivo electromédico facilita el tratamiento, ya que los centros de rehabilitación no siempre están cerca de casa y no todos tienen la intención de viajar largas distancias. Además, reduce los costos de viaje y, lo más importante, ¡ahorra tiempo!

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